No le quites la grasa a la carne, ya que aporta sabor y jugosidad. Si no te la quieres comer, retírala después de asar la carne. Si lo deseas puedes hacer cortes a la grasa en forma de cuadrados o rombos, para que se derrita más fácilmente.
Los bifes de punta de ganso se deberían cortar en sentido contrario a las fibras musculares del corte. Otros recomiendan hacerlo en la misma dirección de las fibras, para que el corte final, al comerla, sea en dirección opuesta.
Recomiendo cortar en contra de las fibras, ya que no todos los comensales van a saber cómo cortar adecuadamente la carne.
Los bifes deben tener dos dedos de grosor. Este es el tamaño ideal, ya que si son muy delgados se van a asar demasiado rápido, por lo que no alcanzará a formarse la costra externa de la carne.
Por último, recomiendo condimentar de inmediato la carne, por todas sus caras, usando sal entre fina y pimienta.
Dado que los bifes se asan más rápidamente que el corte completo, recomiendo usar sal entre fina, y no sal gruesa.