La carne se sella en el sartén y luego se termina en el horno.
Recomiendo usar un sartén de hierro fundido, que puedes usar sobre la cocina y dentro del horno. Si no tienes, deberás cambiar de recipientes antes de meter la carne en el horno.
Pon a calentar el horno a 150°C
Al mismo tiempo, pon a calentar el sartén de fierro a fuego alto.
Sugiero hacer unos cortes en la piel de la pulpa de cerdo para evitar que la carne se deforme con el calor.
Cuando el sartén esté bien caliente, ponle un poco de aceite de maravilla y luego la carne.
El sellado debe ser rápido, 1 minuto y medio por lado.
Cuando estés sellando el primer lado de la carne, condimenta ese lado sólo con sal.
Cuando des vuelta el medallón, por el otro lado de la carne (que quedará hacia arriba en el horno), condimenta con la sal chilena y sal a gusto.
Cuando termines de sellar la carne métela en el horno durante 10 minutos y estará lista.