La leche asada es una receta típica de países como Chile, Perú y otras naciones latinoamericanas. El origen de la leche asada se desconoce, pero se cree que fue traída por los conquistadores españoles, debido a que en Europa existen postres similares.
Primero se prepara el caramelo. En una olla o sartén agregar 1 taza de azúcar y empaparla con 4 cucharadas soperas de agua. Poner a calentar a fuego. No se debe revolver. Para mezclar mover la olla lentamente.
Si se revuelve se puede cristalizar el caramelo (se transforma nuevamente en azúcar).
Luego de 5 minutos al fuego agregar el jugo de medio limón, que ayuda a evitar la cristalización.
Cocinar hasta que la preparación tome el color del caramelo, un tono dorado. Quitar inmediatamente del fuego cuando suceda el cambio de color, para evitar que el caramelo se pegue.
Poner el caramelo en una budinera, donde posteriormente se preparará la leche asada. Dejar enfriar.
Preparar la leche asada:
Para la leche asada mezclar en un bol: 8 huevos enteros, 3/4 de taza de azúcar (opcional, ya que con el azúcar del caramelo puede ser suficiente), cáscara de naranja, y corteza de canela triturada. Revolver suavemente, sin batir para evitar que le huevo produzca burbujas.
Agregar 1 litro de leche a la preparación y mezclar.
Colar la preparación para quitar trozos de huevo, naranja y canela.
Agregar una cucharada sopera de esencia de vainilla.
Agregar la preparación a la budinera donde se encuentra el caramelo.
Poner en el horno a fuego medio (150°-180°C) por 1 hora y 20 minutos.
Luego, dejar enfriar la leche asada 2 horas a temperatura ambiente, y luego poner en el refrigerador durante 12 horas antes de consumir.